La fisioterapia es un enfoque comúnmente utilizado para tratar cicatrices de diferentes tipos y orígenes, como las causadas por cirugías, lesiones o quemaduras. El objetivo de la terapia física en estos casos es mejorar la apariencia y la funcionalidad de la cicatriz, y disminuir las posibles complicaciones, como la adherencia cicatricial.

ABORDAJE FISIOTERAPÉUTICO EN CICATRICES

Existen diferentes técnicas y tratamientos que pueden ser utilizados por un fisioterapeuta para tratar una cicatriz, tales como:

  1. Masajes: el fisioterapeuta puede realizar masajes circulatorios y drenaje linfático para mejorar la circulación sanguínea y linfática de la zona afectada, lo que ayuda a reducir la inflamación y mejorar la elasticidad de la piel.
  2. Ejercicios de movilidad: los ejercicios pueden ayudar a mejorar la movilidad de la zona afectada, lo que puede reducir el riesgo de adhesiones y mejorar la funcionalidad de la cicatriz.
  3. Estiramientos: los estiramientos pueden ayudar a prevenir la rigidez y la pérdida de flexibilidad en la cicatriz.
  4. Aplicación de calor y frío: la aplicación de calor o frío puede ayudar a reducir el dolor y la inflamación en la zona de la cicatriz.
  5. Terapia manual: el fisioterapeuta puede utilizar técnicas manuales para movilizar y estirar los tejidos cicatrizados.
  6. Tecarterapia: es una técnica de fisioterapia que utiliza corrientes eléctricas de alta frecuencia para mejorar la circulación sanguínea y linfática, promoviendo la regeneración celular y la curación de los tejidos, por ello se  utiliza para el tratamiento de cicatrices con el objetivo de mejorar su calidad y reducir los síntomas asociados, como la rigidez, la inflamación y el dolor.

Es importante mencionar que el tratamiento de una cicatriz con fisioterapia debe ser personalizado y adaptado a las necesidades específicas del paciente y de la cicatriz en cuestión. Por lo tanto, es recomendable consultar con un fisioterapeuta especializado en el tratamiento de cicatrices para obtener un plan de tratamiento adecuado.

Evidencias científicas de tratamientos de cicatrices con fisioterapia

La evidencia científica ha demostrado que la terapia física puede ser altamente efectiva en la reducción de los síntomas asociados a las cicatrices, así como en la mejora de la calidad del tejido cicatricial. Algunos estudios han demostrado que la terapia física puede mejorar la elasticidad de la piel en la zona de la cicatriz, disminuir la inflamación, reducir la rigidez y la tensión en el tejido, y mejorar la movilidad y la funcionalidad.

Un estudio publicado en el Journal of Plastic, Reconstructive & Aesthetic Surgery en el 2013, evaluó la efectividad de la terapia física en la reducción de las cicatrices después de una cirugía plástica. Los resultados demostraron que la terapia física fue efectiva en la mejora de la calidad de las cicatrices, reduciendo la tensión en el tejido cicatricial y mejorando la elasticidad de la piel.

Otro estudio publicado en el Journal of Burn Care & Research en el 2014, evaluó la efectividad de la terapia física en la reducción de las cicatrices después de una quemadura. Los resultados mostraron que la terapia física fue efectiva en la mejora de la apariencia de la cicatriz, reduciendo la tensión y la rigidez en el tejido cicatricial.

En conclusión, la evidencia científica sugiere que la terapia física puede ser altamente efectiva en el tratamiento de cicatrices. Es importante mencionar que el abordaje de fisioterapia debe ser adaptado a las necesidades específicas de cada paciente y de cada cicatriz, y debe ser realizado por fisioterapeutas especializados en el tratamiento de cicatrices. Además, es importante que el tratamiento sea iniciado tan pronto como sea posible después de la cicatrización, para obtener mejores resultados.